¿Qué es la hiperactividad infantil?
Cuando hablamos de hiperactividad infantil, hablamos de un trastorno de conducta de origen neurológico. Por lo general, es un trastorno que afecta más a los niños que a las niñas, y su característica principal es el “déficit de atención” (TDAH).
Se trata de un trastorno bastante frecuente entre los niños menores de 7 años. Hoy en día, los expertos todavía no han conseguido ponerse de acuerdo en cuanto a las causas del mismo.
Algunos apelan a un retraso en el desarrollo del cerebro (aunque no está demostrado) y otros a factores hereditarios. Aunque la opinión más generalizada es que ambos factores interactúan de forma conjunta.
Síntomas de la hiperactividad
Para detectar si tu hijo/a sufre de hiperactividad, te dejamos algunos signos más frecuentes que podrás detectar de forma rápida sencilla:
- En primer lugar, los niños hiperactivos tienen una gran tendencia a ser distraídos y no escuchar cuando se les habla. En general, les cuesta estar concentrados en una misma tarea por un largo tiempo.
- En segundo lugar, cuando se realizan actividades en grupo, les cuesta más trabajo que al resto esperar su turno o no destacar por encima de los demás. Enseguida se cansan una vez empieza el juego y querrán empezar juegos nuevos de forma continua.
- Y en tercer lugar, suelen tener un bajo rendimiento escolar ya que presentan dificultades en el aprendizaje, la memorización y asimilación de conceptos.
Es importante observar al niño de manera progresiva hasta los cuatro años. De 0 a 4 años, pueden existir estos síntomas aunque no de manera acentuada y tratarse finalmente de un niño sin hiperactividad. Sin embargo, sí siguen persistiendo a partir de los 4 años deberíamos acudir al médico.
Tratamiento de la hiperactividad
Lo ideal es combinar tratamientos en casa y en el colegio. Por supuesto, si fuese necesario acompañarlo con medicamentos o psicología. Existen tres grandes áreas:
- Tratamiento farmacológico: una vez el médico le haya recetado los medicamentos que necesita, os recomendamos apoyarlo mediante procesos de regulación de conducta en casa.
- Tratamiento psicológico: en el caso de que fuese necesario, es muy importante apoyarlo estableciendo unas normas rígidas y explícitas, para favorecer así la integración del niño.
- Tratamiento educativo: nos referimos a educar mediante premios y castigos. Se trata de una forma eficaz, en la que podrás fijar objetivos concretos con el niño, y una vez sean alcanzados, premiar el esfuerzo realizado.
Consejos para tratar la hiperactividad
Si eres papá o mamá de niños hiperactivos, te damos algunos consejos que estamos seguros te serán de gran ayuda.
Una de las cosas más importantes que debemos cuidar es el entorno del pequeño. Intenta crear un ambiente tranquilo con unas normas establecidas y pautas a seguir, como por ejemplo, los mismos horarios de comida, sueño, hacer las tareas, etc. Es imprescindible que exista la cooperación entre educadores y padres, en el aula y el hogar.
Por otro lado, debemos motivarlos planteándoles pequeñas metas alcanzables. Es decir, marcar pequeños objetivos diarios con los que ir creciendo de forma progresiva. Se trata de fijar metas no muy exigentes, para que no supongan una situación de ansiedad ni estrés extremo.
Por último, te animamos a asistir a seminarios y cursos para la hiperactividad, donde podrás aprender estrategias educativas eficaces, que te ayudarán a resaltar y ensalzar las conductas positivas del niño y controlar las negativas.
Esperamos que toda esta información te haya sido de gran ayuda. Si necesitas material para trabajar con niños con hiperactividad, te dejamos aquí el enlace directo a nuestro catálogo.
