Autor: Editorial GEU

Líderes en Atención a la Diversidad.

Consigue mejorar la comprensión lectora en niños

mejorar la comprensión lectora en niños y niñas

En el post de hoy, consigue mejorar la comprensión lectora en niños y niñas y aprende la importancia de desarrollarla desde edades tempranas.

Aunque es cierto, que ya estamos muy inmersos en la era digital, el libro, cuadernillos y materiales de refuerzo siguen siendo uno de los recursos más usados para el proceso de enseñanza y aprendizaje, tanto en el aula como en casa.

Ya que es de vital importancia trabajar la comprensión lectora para todos los ámbitos de su vida, no solo para el ámbito del lenguaje, sino para el resto de asignaturas y por supuesto, su día a día.

¿Qué vas a encontrar en este artículo sobre como mejorar la comprensión lectora en niños?

  • Qué es la comprensión lectora.
  • Por qué es importante trabajarla desde niño.
  • Cómo podemos ayudar a los alumnos a desarrollarla.

¿Es igual leer qué comprender?

Tanto la lectura, como la comprensión lectora, son habilidades que se aprenden y se desarrollan mediante el trabajo continuo, día tras día. Pero, ¿es lo mismo?

La acción de leer consiste en reconocer letras, palabras y frases y ser capaz de enunciarlas. Pero la comprensión lectora va más allá. Se trata de un proceso mental mediante el cual se asimila todo lo que hemos leído, se piensa y se le da un significado en nuestra mente.

De poco sirve leer mil veces un texto, si no existe el proceso de comprensión del mismo. La comprensión lectora permite la reflexión, análisis de la información, interpretación y relación con conocimientos previos.

Por ejemplo, a frase “el avión despegó” solo tiene tres palabras, pero comprenderlas significa pensar en la forma del avión despegando, con personas en su interior, que se desplaza hacia otro lugar, etc.

¿Por qué es importante trabajar y mejorar la comprensión lectora desde temprana edad?

“La lectura es a la mente lo que el ejercicio al cuerpo.” Joseph Addison

Lamentablemente hay muchos niños y niñas que no tienen un buen rendimiento académico debido a lo difícil que les resulta comprender aquello que están leyendo. Existen muchos motivos y uno de ellos tiene que ver con el desarrollo insuficiente de esta habilidad.

Si ayudamos a los alumnos a que entiendan lo que leen, se les hará más fácil aprender otros contenidos. Es importante entrenar esta habilidad desde que los niños aprenden a leer. Cuando los alumnos y alumnas adquieren esta capacidad, mejoran también en otras materias.

¿Cómo ayudar a los alumnos a desarrollar su comprensión lectora?

¿Recuerdas los cuadernillos de infantil y primaria de lecturas comprensivas en los que tenías que identificar los personajes, escenarios, situaciones? Solían plantear preguntas como: ¿Quién es el personaje principal? ¿Qué problema tiene? ¿Qué hace para resolverlo? ¿Cómo termina la historia?

Estas preguntas animan a ir más allá, a extraer la información y comprenderla finalmente.

Esta estrategia se sigue usando con un grado creciente de complejidad a medida que el alumno o alumna va creciendo. Por ejemplo, mediante sesiones de trabajo en las que se les pide que analicen todos los personajes de un cuento, qué relación existe entre ellos, describir los escenarios donde se desarrollan las historias, etc.

Aquí te mostramos algunos métodos para a ejercitar la comprensión lectora del niño o niña, toma nota:

  • Leer cuentos clásicos y formular preguntas. Los cuentos clásicos van pasando de generación en generación. Las abuelas los transmitieron a sus hijos y nietos y así seguirán a lo largo del tiempo. ¿Quién no ha leído Caperucita Roja? Puedes leer este gran cuento con tus hijos, nietos, alumnos y al final formular algunas preguntas que ayudarán a los pequeños a ejercitar su comprensión lectora.

Después de leer el cuento, el niño debe responder:

  • ¿Por qué la madre de Caperucita le aconsejó ir a casa de la abuela por el camino largo?
  • ¿Qué decisión crees que debió haber tomado Caperucita?
  • Piensa que tú eres Caperucita y te encuentras con un lobo que quiere hablar contigo, ¿Qué harías?

Además, de usar estas preguntas para hacerles reflexionar, también te aconsejamos:

  • Utiliza materiales con apoyo visual como los pictogramas o ilustraciones, que ayuden al alumno a identificar palabras, sílabas y letras. Esta estrategia ayudará al alumno a mejorar su capacidad de comprensión lectora desde el primer momento.
  • Realiza ejercicios como sopas de letras, crucigramas, relación de elementos con flechas, pintar o marcar la respuesta correcta. Estos ejercicios son ideales para desarrollar la comprensión lectora de forma amena y divertida.
  • Ver una película y hacer preguntas acerca del argumento y los personajes.
  • Leer chistes o adivinanzas que les hagan pensar.

Consigue que niños y niñas comprendan lo que leen.

Éstos son sólo algunos métodos para ejercitar la comprensión lectora de niños y niñas de primaria. Aunque estamos seguros de que puedes encontrar muchos más, pero lo más importante es que nuestra labor como padres y profesores, es procurar que los niños desarrollen esta habilidad desde pequeños.

Ya que se trata de una herramienta que tendrá un gran impacto a lo largo de su vida, en su educación y desempeño académico y profesional, y les permitirá entender e interpretar el mundo que les rodea.

En Editorial GEU contamos con diversos materiales relacionados con la lectura comprensiva organizados por cursos desde educación infantil hasta sexto de primaria. Es un material diseñado para desarrollar habilidades de lectoescritura, fomentando el trabajo autónomo de los alumnos y atendiendo a la diversidad en el aula, lo que permitirá a cada alumno avanzar a su ritmo.

Los paquetes de Lecturas Comprensivas van aumentando su dificultad en los ejercicios de manera paulatina. Así el alumno podrá ir avanzando poco a poco y al mismo tiempo trabajar: lectura, escritura, gramática, vocabulario y ortografía.

Te invitamos a descubrirlos y ayudar a tu pequeño a desarrollar su comprensión lectora 😉

Desarrollo moral en los niños: distinguir entre el bien y el mal

desarrollo de la moralidad en niños

En el post de hoy, queremos hablarte sobre el desarrollo moral en los niños. Y es que si no lo sabías, los bebés nacen sin ninguna clase de sentido moral, pero empiezan a formar su moralidad a edades tan tempranas, alrededor de los seis meses.

Es en este momento cuando empiezan a desarrollar la habilidad de distinguir entre lo que está bien y lo que está mal, cualidad humana clave para un correcto desarrollo individual y grupal.

Este sentido moral, precisa de las funciones superiores del encéfalo, de las emociones y la cognición. Implica a amplias redes neuronales y su expresión depende del nivel de desarrollo del lenguaje y de los circuitos neuronales de la sociabilidad.

Por eso, resulta tan complicado su estudio y para facilitarlo, vamos a dividirlo en dos grandes etapas, para poder entenderlo mucho mejor:

La moral en niños de 2-6 años

Para que ocurra un desarrollo moral adecuado en los niños, es de vital importancia que los padres y el resto de su entorno familiar y escolar se involucren con el pequeño, enseñándole valores esenciales que le facilitarán una integración social correcta.

Por eso, es importante conocer las etapas del desarrollo moral desde edades muy tempranas:

  • 2 años: las normas son algo externo al niño, que se guía principalmente por sus impulsos. El sentido del bien y del mal está presente, pero es necesario inculcar el sentido de la justicia y la equidad a edades tempranas para que el niño las interiorice. Conforme se va ampliando su lenguaje, el niño podrá ir haciendo suyas las advertencias de sus padres para poder aprender de sus experiencias.
  • 3 años: se empieza a desarrollar la empatía, pero aún no es capaz de ponerse en el lugar del otro para entender su punto de vista.
  • 4 años: entiende que sus acciones tienen consecuencias y empieza a ser capaz de tomar responsabilidad por ellas, pero sólo si han causado un perjuicio, fuera o no fuese ésta su intención. Por ejemplo, si araña a otro niño y le hace sangre, se sentirá mal, pero si no le hace ningún daño le costará entender por qué está mal arañar. A estas edades sigue siendo complicado apreciar los distintos puntos de vista de una misma situación, por lo que su concepto de la justicia es un trato totalmente igualitario, sin tener en cuenta las distintas circunstancias de cada individuo.
  • 6 años: para niños de esta edad, las reglas tienden a ser absolutas, con la culpa asignada por malos resultados independientemente de las intenciones iniciales.

Moralidad de los 6 a los 12 años

  • 6 años: a esta edad más avanzada, el nivel de desarrollo moral varía de manera mucho más palpable de niño a niño. Por lo general, las normas sociales ya se han interiorizado y la mayoría las acepta y las cumple cuando las establece un adulto con autoridad como puede ser un padre o un profesor. Las decisiones las toman teniendo en cuenta posibles consecuencias, por lo que eligen adoptar conductas que los beneficiarán a ellos mismos, sin tener muy en cuenta a los demás.
  • Desde los 6 a los 10 años: se irán reconociendo las necesidades y deseos de otras personas, aunque sigue siendo el beneficio propio lo que rige su conducta.
  • 10-11 años: empiezan a tener en cuenta muchos más factores externos que afectarán a su conducta, como la presión social por parte de sus compañeros, el deseo de complacer a figuras de autoridad como padres o hermanos mayores. Evitan el castigo y comienzan a tratar a las personas como quieren ser tratados.

Algunos de los materiales que pueden ayudarte en la transición de una etapa a otro son:

  • Aprendo a comportarme: específicamente desarrollado para mejorar la conducta infantil a través de ejercicios con tarjetas que representan las situaciones más conflictivas y comunes que suelen presentarse en los ámbitos social, escolar y familiar. Recomendado para Educación Infantil y TEA.
  • Trabajando habilidades sociales 1: desarrollado por expertos en pedagogía terapéutica para trabajar las habilidades sociales y de convivencia más importantes en la vida diaria y Trabajando habilidades sociales 2.

Esperamos que esta información te haya sido de gran ayuda. Si tienes dudas, por favor ponte en contacto con nosotros.

Etapas de la inteligencia infantil

etapas de la inteligencia infantil

El desarrollo de las etapas de la inteligencia infantil, al igual que el desarrollo físico, se puede separar en diferentes etapas conforme nuestras capacidades van evolucionando.

El psicólogo, Jean Piaget, planteó que en los primeros años de vida, las capacidades mentales de los niños evolucionan en fases cualitativamente diferentes entre sí. Un tema que nos parece muy interesante.

Por eso, en el post de hoy, queremos explicarte a continuación las distintas etapas de la inteligencia infantil por tramos de edad:

Etapas de la inteligencia infantil

1. Sensoriomotora (0 a 2 años)

En esta etapa infantil, los bebés juegan para satisfacer sus necesidades motoras y sensoriales. Moviendo sus extremidades, mirando atentamente a su alrededor, tocando cosas y metiéndoselas en la boca. Un comportamiento que se centra solamente en ellos mismos y no en la perspectiva de otros.

Ocurre entre el nacimiento y la aparición del lenguaje articulado en frases simples. Dado que el niño o niña, aún no tiene capacidad de lenguaje. Por lo que esta fase se define por una interacción física con el entorno mediante juego experimental e interacciones con personas, objetos o animales que rodean al bebé.

Por eso, las primeras formas de lenguaje que muestran los bebés aparecen como comunicación egocéntrica, siendo esto un reflejo de la función que acaban de adquirir.

2. Preoperacional (3 a 7 años)

En esta segunda etapa, los niños ya empiezan a adquirir el lenguaje de manera más compleja y la capacidad de ponerse en el lugar de los demás y, por tanto, el comienzo del uso de la razón (aunque aún de forma muy limitada).

El comportamiento y pensamiento egocéntrico sigue presente, pero no de manera tan central, por lo que los niños pueden actuar y participar en juegos de rol, pero todavía presentan dificultades con pensamientos más abstractos.

Piaget menciona que en esta etapa de Infantil a Primaria, está muy presente el llamado “pensamiento mágico”, que asocia coincidencia con causalidad mientras intenta comprender cómo funciona el mundo.

El pensamiento mágico es responsable de que los niños crean en cosas como el ratoncito Pérez o los Reyes Magos sin cuestionar mucho su existencia.

3. Operaciones concretas (7 a 12 años)

Conforme los niños van adquiriendo la capacidad de usar la lógica de manera más extendida, son capaces de matizar la información que reciben y por tanto cuestionarla.

El pensamiento egocéntrico que antes tenían, va desapareciendo y empiezan a categorizar aspectos de la realidad de forma mucho más compleja. Esta es la etapa donde aparece la autoestima.

4. Operaciones formales (desde los 12 años hasta la vida adulta)

En esta etapa, el cerebro empieza a mostrar todas sus capacidades y pasamos de un pensamiento lógico a un pensamiento analítico, “pensar sobre pensar”. A partir de este momento, los niños y adolescentes pueden usar el razonamiento hipotético deductivo así como analizar y manipular deliberadamente esquemas de pensamiento.

En la etapa de abstracción, se comprende y experimenta que una posibilidad puede convertirse en una realidad dependiendo de las decisiones que se tomen hasta llegar al resultado.

El pensamiento adolescente cuestiona todo y empieza a pensarse las cosas de manera mucho más profunda, desarrollando así su personalidad y su propio código moral y ético.

Es por eso que durante esta etapa del desarrollo intelectual empezamos a detectar patrones generacionales y es cuando podemos empezar a definir una generación.

Es importante mencionar que Piaget, aunque hizo muy buen trabajo separando y definiendo las distintas etapas del desarrollo intelectual infantil y adolescente, cada niño tiene un ritmo propio, y estos números son estimaciones y medias que no tienen por qué ser exactas para todos.

Su teoría es mucho más compleja y extensa que estas cuatro etapas, pero éstas sirven para entender la importancia que ha tenido su trabajo en el ámbito de la Psicología del Desarrollo.

Materiales para trabajar la inteligencia infantil por etapas

Por último, te dejamos por aquí un listado de los materiales que tenemos disponibles en nuestra web para trabajar la inteligencia infantil por etapas:

– Materiales para trabajar la inteligencia: Etapa Infantil.

– Materiales para trabajar la inteligencia: Etapa Primaria.

Materiales para trabajar la inteligencia: Secundaria.

– Materiales para trabajar la inteligencia: Bachillerato.

Materiales para trabajar la inteligencia: Educación Especial.

Esperamos que esta información te haya sido de gran ayuda. Si tienes cualquier duda, por favor, ponte en contacto con nosotros, estaremos encantados de poder atenderte.

Conoce las reglas básicas de la ortografía

reglas de ortografía básica

En el post de hoy, conoce las reglas básicas de la ortografía española y es que por lo general, el castellano es un idioma relativamente fácil de escribir puesto que es un idioma fonético: cada uno de sus fonemas (sonidos) corresponde con una letra de nuestro alfabeto, pero con el paso de los siglos, muchos fonemas se han acabado pronunciando de la misma manera, dejándonos 27 letras para representar 24 fonemas. 

Estas divergencias provocan grandes dificultades en el aprendizaje tanto para niños españoles como para estudiantes de español como lengua extranjera. Por eso es muy importante tenerlas presentes en el ámbito del apoyo escolar, ya que frustran a muchos niños y niñas. A continuación, les recordamos algunas reglas ortográficas básicas en las que hay que hacer hincapié.

Reglas básicas de ortografía: la B y la V

Se escriben con B:

  • los infinitivos y todas las formas de los verbos beber y deber;
  • los infinitivos y formas verbales de caber, haber y saber;
  • las terminaciones -ba, -bas, -bamos, -bais y -ban;
  • el pretérito imperfecto de indicativo del verbo ir;
  • los vocablos que empiezan con el sonido bibl- (biblioteca) o con la sílaba bu-, bur- y bus- (burro, burla, buscar);
  • las terminaciones -bundo, -bunda y -bilidad (excepto movilidad y civilidad): nauseabundo, furibunda, amabilidad
  • las palabras en las que dicho sonido precede a otra consonante: las sílabas bla, ble, bli, blo, blu y bra, bre, bri, bro, bru;
  • los prefijos bi-, bis-, biz-;
  • el sonido final -bir de los infinitivos y todas las formas de estos verbos (excepto hervir, servir y vivir);
  • los prefijos bien- y bene-: bienintencionado, beneplácito

Se escriben con V:

  • el presente de indicativo, imperativo y subjuntivo del verbo ir (voy, vas; ve, vaya; vaya, vayamos) y el pretérito indefinido, el pretérito imperfecto y el futuro de subjuntivo de los verbos estar, andar y tener;
  • las terminaciones de adjetivos -ava, -ave, -avo; -eva, -eve, -evo e -iva, -ivo: octava, suave… (se exceptúan árabe, sílaba y sus compuestos);
  • después de d: advertencia, advenedizo, adversario;
  • los prefijos vice-, villa-, villar-: vicealmirante, Villalobos, etc.;
  • las terminaciones -viro, -vira, -ívoro e -ívora (excepto víbora): Elvira, carnívoro, herbívora;
  • las terminaciones -servar y -versar de los verbos conservar, observar, reservar y conversar;
  • las formas de los verbos que no tienen ni v ni b en su infinitivo: tuve, estuve, anduvieron, vayamos (se exceptúan las terminaciones –ba, -bas, -bamos, -bais y -ban del pretérito imperfecto de indicativo);
  • las palabras en las que este sonido aparece detrás de las letras b, d y n: obvio, adverso, invierno, y sus compuestos y derivados.

Reglas básicas de ortografía: la J y la G

Son otras dos consonantes que generan dudas y sobre las que se han escrito también normas ortográficas que debes saber. Sobre estas dos letras recordaremos que todas las palabras castellanas que acaben con “aje” o “eje” usan la J. En este sentido, tendremos presente palabras como garaje o equipaje. Para la G, recordaremos que siempre se usa en verbos que acaben en -irgerar, -ger o -gir. Tales como “ingerir”, “aligerar” o “fingir” (a excepción de tejer y crujir).

Acentos

  • Las palabras agudas llevan tilde cuando terminan en -n, en -s o en vocal: balón, compás, café, colibrí, bonsái; pero si terminan en -s precedida de otra consonante, se escriben sin tilde: zigzags, robots. Tampoco llevan tilde las palabras agudas que terminan en -y, pues esta letra se considera consonante: guirigay, virrey, estoy.
  • Las palabras llanas (graves) llevan tilde cuando no terminan en -n, en -s o en vocal: clímax, hábil, tándem. También se acentúan cuando terminan en -s precedida de otra consonante: bíceps, cómics, fórceps; y cuando terminan en -y, pues esta letra se considera consonante a efectos de acentuación: póney, yóquey.
  • Las palabras esdrújulas y sobresdrújulas siempre llevan tilde: cántaro, mecánica, cómetelo, llévesemelo.
  • Los monosílabos no llevan tilde pero existen ciertas excepciones como la de los pronombres interrogativos (¿qué?).

Por qué, porque, por que y porqué

  • Por qué: se usa para introducir oraciones exclamativas e interrogativas. (¿Por qué lloras?)
  • Porque: es una conjunción que introduce oraciones subordinadas que expresan relaciones de causa. Equivale a ya que, puesto que o dado que. (Cogí el paraguas porque llovía.)
  • Por que: se usa cuando queremos sustituir a lo/los que/el cual/la cual. (Estaba ansioso por que el profesor entregara las notas.)

Reglas básicas de ortografía: la Y y la LL

Se escriben con LL:

  • Las palabras que empiezan por fa-, fo- o fu: fallar, fuelle;
  • Las terminaciones -alle, -ella, -elle, -ello, -illa e -illo (Excepto epopeya, plebeyo, zarigüeya, omeya): valle, paella, muelle, bello, sombrilla, estribillo
  • Las terminaciones verbales -ellar, -illar, -ullar y -ullir y el verbo hallar. (estrellar, maquillar, aullar, tullir, yo hallo)

Se escriben con Y:

  • Palabras que contienen -yer, -yec. (yerno, inyección);
  • Palabras con los prefijos ad-, des-, dis- y sub-. (adyacente, desmayar, disyuntivo, subyacente);
  • Los diptongos -ay, -ey, -oy y -uy al final de una palabra, así como sus plurales, excepto la forma verbal fui. (Bombay, buey, hoy, muy);
  • Los verbos ayunar, desayunar, subrayar y desmayar. (yo ayuno, se desmayó);
  • Las formas verbales de los verbos cuyo infinitivo no contienen ll o y. (distribuir → él distribuyó)

Reglas básicas de ortografía: la H

La letra H en español es muda, es decir, no se pronuncia. Por eso, genera muchas dudas a la hora de escribir palabras que la contienen. Se escriben con H las siguientes palabras:

  • Las palabras que empiezan por el diptongo ue. (hueco, huelga, huella, huérfano, huerto);
  • Delante de las secuencias -ia- e -ie- al principio de la palabra. (hiato, hierba);
  • Palabras con las secuencias hog-, herm- horm-, horr-, hosp-, ex (excepto ermita y ogro, así como los derivados de ambos, exuberancia y exuberante): (hogaza, hermandad, hormiga, horrible, hospicio, exhausto)
  • Palabras derivadas de palabras con H excepto hueso → óseo, huevo → óvulo, hueco → oquedad huérfano → orfanato. (huelga → huelguista, habitar → habitación);
  • Las formas verbales de los verbos cuyo infinitivo h. (​​haber → he, hay, habrá)
  • Palabras que empiezan por los prefijos siguientes: hecto-, helico-, helio, hema-, hemato-, hemo-, hepato-, hemi-, hepta-, hetero-, hexa-, hidra/o-, hiper-, hipo-, hol(o)-, homeo-, homo-;
  • Las interjecciones más comunes: ah, eh, oh, hala, bah, huy (también uy)

Estas son algunas de las reglas básicas de ortografía de nuestra lengua. Si quieres saber más, puedes encontrar en nuestra web, nuestro nuevo cuaderno «Un 10 en ortografía«, donde se trabajan con ejercicios y divertidas actividades los 22 errores más comunes en nuestra lengua, tanto para Primaria, como Secundaria y educación de adultos.

O también podemos empezar por ellas y trabajar con materiales complementarios como nuestra categoría de «Ortografía Divertida«, colección que se divide curso a curso, desde 1º de Primaria a 6º de Primaria.

Esperamos que toda esta información te haya sido de gran ayuda, si tienes cualquier duda, solo tienes que ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de poder resolverlas.

Inteligencia Emocional en niños: trabaja la vergüenza

vergüenza inteligencia emocional

Aprender a gestionar la inteligencia emocional en niños, trabajando la vergüenza en los niños es un sentimiento que preocupa mucho a los padres, que, queriendo que sus hijos la superen lo antes posible, se esfuerzan por exponerlos a situaciones que los obligan a interactuar con desconocidos u otros niños, sin saber que esta, no es una muy buena forma de ayudarlos a perder la vergüenza.

Para ayudar a niños vergonzosos, primero tenemos que entender qué es la vergüenza, emoción que empieza a aparecer en los primeros 18-24 meses de vida.

Los niños muestran la vergüenza de manera verbal y no verbal, avisando cuando ciertas situaciones le hacen sentirla o gestualizando este sentimiento mediante respuestas corporales como ponerse colorado, bajar la cabeza, salir corriendo, esconderse detrás de un padre.

Es importante recordar que la vergüenza no es lo mismo que la timidez, pero trabajando la timidez estaremos haciendo un avance en la inteligencia emocional del niño o la niña y podremos evitar, en parte, que se produzca la vergüenza.

¿Cómo ayudo a mis hijos a gestionar la vergüenza?

Lo primero que hay que entender es que los niños necesitan empatía por nuestra parte, entonces, reprochar la vergüenza o ponerla en evidencia no ayuda. Por eso, es bueno evitar expresiones como “¿Te ha comido la lengua el gato?”, “¿A quién habrá salido este niño tan vergonzoso?”, “¿Es que no vas a saludar a tus titos? Eso es de mala educación.”, porque lo único que vamos a conseguir con este tipo de comportamiento es hacer a los niños sentirse inseguros y vulnerables, resultando en lo opuesto que queremos conseguir.

Para ayudar a los niños a construir su inteligencia emocional de manera saludable, tenemos que ayudarlos a entender qué tipo de sentimiento es la vergüenza y por qué se sienten así, para que en un futuro puedan identificarla y usar las herramientas correctas para gestionar la situación.

Los niños necesitan sentirse comprendidos, seguros y conectados, así que es muy importante asegurarles que lo que sienten es normal y no pasa nada, y que es algo que podéis superar juntos.

Consejos para trabajar la vergüenza

A continuación proponemos una serie de consejos que pueden ser muy útiles al trabajar la vergüenza en niños:

  1. Ser un buen ejemplo. Los niños son espejos de su entorno, y si ven a sus referentes adultos intentando superar cosas que a ellos también les pasan, serán más propensos a hacer lo mismo que sus modelos a seguir.
  2. Evitar las críticas, sobre todo las no constructivas. Los niños están aprendiendo todo desde cero y, como todos, necesitan mucha práctica. Criticar sus esfuerzos solo sirve para destruir su autoestima y generar inseguridades que harán que no quiera volver a intentarlo delante de nadie.
  3. Elogiar sus progresos. En vez de criticar lo que no hacen correctamente, la mejor opción es reforzar positivamente lo que hacen bien y sus esfuerzos. Esto fomenta su seguridad en sí mismos y evitará situaciones en las que sientan vergüenza.
  4. Fomentar su independencia. Cometer errores es parte esencial de todo aprendizaje, y hay que dejar que los niños los cometan. Dejar que el niño haga cosas de manera autónoma refuerza la idea de que el adulto cree en sus capacidades, haciendo que el niño se sienta más seguro de sí mismo.
  5. No hablar ni responder por el niño o la niña, incluso cuando no quiere contestar. Esto está ligado al punto anterior; hay que reforzar la idea de que un niño es una persona individual y autónoma.
  6. Estimular que haga preguntas y peticiones a terceros y elogiar cuando lo hagan.
  7. Por eso, hay que apoyar a los niños sin llegar a la sobreprotección, dejando que se enfrente a situaciones que le generan vergüenza.
  8. No forzarles a que hagan cosas que no quieren hacer, aunque esas cosas las hagan en privado sin problema.
  9. No compararlos con otros niños. Con esto, lo único que conseguimos es que el niño se sienta inadecuado e inferior en comparación con el resto.
  10. Fomentar que se relacione con otros niños desde edades muy tempranas para que se acostumbre a estar en sociedad de manera natural.

Esperamos que estos consejos te hayan ayudado a comprender un poco mejor la situación en la que puede encontrarse actualmente tu hijo o alumno. En nuestra web, encontrarás una colección completa dedicada a la gestión de la inteligencia emocional en niños de manera saludable y un cuaderno específico para trabajar la vergüenza que puedes encontrar en el siguiente enlace: cuaderno para trabajar la vergüenza.

Si tienes cualquier duda, ponte en contacto con nosotros, estaremos encantados de poder resolverlas.