Como sabes, la estimulación cognitiva es necesaria en los primeros años de vida, ya que son los años más importantes para el proceso de crecimiento del cerebro y sus capacidades. En concreto, la edad comprendida entre los 0 y 6 años, se caracteriza por una gran flexibilidad neuronal.
Es esta flexibilidad precisamente la que posibilita el desarrollo de funciones esenciales como por ejemplo: el control de la postura, andar o el desarrollo del lenguaje.
Y es que cuando hablamos de desarrollo de la inteligencia en edad temprana, los estudios concluyen que, mientras más estimulación experimente un niño o niña hasta los 6 años, mejores y más desarrolladas estarán las áreas del cerebro.
Beneficios de la estimulación cognitiva
Obtener unos niveles óptimos de atención y concentración es fundamental para que el niño o niña alcance un alto rendimiento durante su proceso de aprendizaje y desarrollo de la inteligencia infantil. Pero, ¿qué ocurre si un pequeño se distrae con facilidad?
En estos casos, es fundamental poner en marcha la estimulación cognitiva, como base para el aprendizaje. En este caso, debemos trabajar para conseguir una buena atención y focalizarnos en un estímulo en concreto.
Además, de una adecuada concentración, para mantenerse activo en una determinada actividad, eliminando elementos de distracción.
Dentro, de los principales beneficios de la estimulación cognitiva destacamos:
- Propiciar actividades de pensamiento y creatividad, imaginación e inteligencia infantil.
- Mejorar su autoestima, confianza y seguridad ante logros personales y escolares.
- Ayudar a mantener procesos cognitivos adecuados de atención, concentración y memoria.
- Estimular el lenguaje, vocabulario y comprensión lectora.
Estimulación cognitiva para niños con necesidades especiales
Por otro lado, los ejercicios de estimulación cognitiva, son una grandísima herramienta para profesionales y educadores. En este caso, los niños con necesidades especiales educativas, requieren de materiales de acuerdo a su condición especial, para trabajar sus capacidades cognitivas, estimulando el cerebro.
Realizar este tipo de actividades, les ayuda a mejorar en cuanto a complicaciones, trastornos y enfermedades.
Esto no quiere decir, que los niños sin ningún tipo de trastorno, no puedan realizar estos ejercicios. Al contrario, siempre es recomendable trabajar la estimulación cognitiva, a cualquier edad, porque nos ayuda a crear nuevas conexiones neuronales.
Estimulación cognitiva para los trastornos del aprendizaje
Por último, te hablamos de la estimulación cognitiva como herramienta para entrenar la plasticidad y mejora del cerebro. Trastornos como el TDAH, la dislexia o discalculia, pueden mejorar de forma parcial o total, así como trastornos del sueño.
TDAH (Trastorno del Déficit de Atención e Hiperactividad)
Es un trastorno que afecta a las conexiones neuronales, haciendo que estas no se comporten como debieran, alterando su capacidad para prestar atención.
Dislexia
Este trastorno afecta al aprendizaje, dificulta la lectura y también la escritura, de tal forma que la persona que lo padece, tiene complicaciones a la hora de realizar una lectura fluida, produciéndose un colapso en su memoria operativa.
Discalculia
Es similar a la dislexia, pero en este caso se trata del lenguaje numérico. Las personas con este trastorno, tienen dificultades a la hora de interpretar los números, operaciones aritméticas, sumas, restas, etc.
Estos trastornos, normalmente se reflejan de forma negativa en el rendimiento académico y escolar de los alumnos, por eso es tan importante trabajarlo a partir de la estimulación cognitiva a temprana edad.
Esperamos que toda esta información te haya sido de gran ayuda. Si tienes cualquier duda, por favor, déjanos un comentario o ponte en contacto con nosotros, estaremos encantados de resolverla.